No es Baldivieso, el jugador boliviano que rompe récords

Pablo Mauricio Baldivieso Ferrufino, nacido en La Paz, es un ex futbolista que ostenta un récord insólito en el fútbol: es el jugador más joven de la historia en debutar en Primera. Sin embargo, una promesa boliviana apareció con una nueva marca.

Baldivieso, nacido el 22 de julio de 1996, comenzó su carrera en las divisiones inferiores de Aurora y en 2009, con apenas 13 años, fue convocado para jugar en primera para el equipo dirigido táctica y técnicamente por su padre, Julio César Baldivieso. Así, el 19 de julio de 2009, el aún niño debutó en la máxima categoría sin ser consciente quizá de que estaba rompiendo un récord en el mundo, convirtiéndose en el debutante más joven en la historia del fútbol.

Sin embargo, otro récord le esperaba todavía a Pablo Mauricio, ya que el 26 de julio de 2012, en el marco de la Copa Sudamericana, Aurora se enfrentaba a Cerro Largo de Uruguay y el joven, ya con 16 años, no solamente jugó aquel encuentro sino que también se transformó en el jugador más joven en disputar una copa internacional. En mayo de 2016 y militando ya en Wilstermann, Baldivieso se convertiría en campeón tras conseguir el título de la Liga Profesional Boliviana junto a su equipo.

Pablo Mauricio también tuvo un paso por la selección de su país. Debutó con la verde en el Sudamericano Sub-20 del año 2015 disputado en Uruguay. Al año siguiente debutó con la Mayor concretando un total de 25 partidos.

La promesa que rompe récords

El nuevo jugador de la primera del club Santos, Miguel Terceros, mejor conocido como Miguelito, se transformó en el extranjero más joven en debutar en el Brasileirao con 18 años, 5 meses y 16 días, superando al argentino Manuel Lanzini, quien hasta ese momento tenía el récord al haber debutado con 18 años, 6 meses y 2 días en el Fluminense.